Crock of Gold: Bebiendo con Shane MacGowan (Crock of Gold: A Few Rounds with Shane MacGowan) (****)

El origen del Irish-punk

Combina imágenes de archivo inéditas de la banda y de la propia familia de MacGowan, junto con animaciones de, entre otros, el ilustrador Ralph Steadman. El documental es una celebración del poeta punk irlandés Shane MacGowan, cantante y compositor principal de The Pogues. Producida por Johnny Depp.

No hay nada que desilusione en las dos horas largas que dura este documental sobre la figura del poeta y músico irlandés Shane MacGowan. Principalmente, porque el interés va en aumento y el clímax se alcanza hacia el final, cuando has saboreado su biografía y han tarareado, aunque solo sea mentalmente, la mayoría de las canciones que suenan en la pantalla. También supone un acercamiento a los parámetros de un género musical que nació con The Pogues y logró con ellos su cénit.

Mucha parte de culpa del acierto de este trabajo hay que encontrarlo en su productor, nada menos que Johnny Depp, y en su director, Julien Temple. Ambos son amigos personales de MacGowan y todo ha resultado más fácil por ello. A pesar de todo, no se eluden las colaboraciones típicas en un trabajo de este tipo, con personajes allegados a su figura central que, como es lógico, no muestran un solo reproche. Son los casos de Bono, Gerry Adams, Nick Cave y Bobbie Gillespie, entre otros.

La parte más ardua es el inicio, pero Temple ha tenido la feliz idea de recurrir a diversas animaciones, principalmente firmadas por Ralph Steadman. De esa forma se relatan pasajes de la vida del músico, así como se subraya la relación que tuvo con sus padres. A continuación, se hace gala de un inmenso archivo videográfico y sonoro para que asistamos al nacimiento del Irish-punk y su posterior evolución de la mano de The Pogues.

Se hace hincapié en el talento innato de MacGowan, personaje de lenguaje directo y llano, aunque pleno de calidad. Su formación académica fue muy escasa, pero consiguió sumergirse en la cultura de manera autodidacta. Tuvo en la lectura de James Joyce y Thomas Moore las principales referencias. De ahí sus letras y sus poemas, en todo momento coloquiales, que se revelan llenas de sentido y que llegan como pocas a sus destinatarios. Razón por la que se le ha llegado a comparar con Charles Bukowski.

El documental gana muchos enteros porque no se reduce únicamente al apartado musical. Se habla también del IRA, de las raíces del folclore irlandés, que tanta influencia ha tenido en las canciones de la banda, y de los tropiezos. Shane aconseja con rotundidad que espero que la gente sepa reconocer sus errores a través de los míos. Como la mayoría de sus colegas, descendió a los infiernos. No en vano se pasó borracho o drogado buena parte de su vida. Por eso, el conjunto de este trabajo llega a ser brutal en todos los sentidos.

Una auténtica celebración desde el punto de vista cinematográfico. Julien Temple, responsable de Principiantes,  es más interesante en su fase de documentalista que como director de largometrajes. Además, cuenta con la experiencia de trabajos anteriores sobre Suggs, Keith Richards, Dave Davies, Paul Weller, Joe Strummer, Duran Duran, Bryan Adams o el festival de Glanstonbury. También ha firmado videos musicales de Rolling Stones, Judas Priest, Sex Pistols, David Bowie, Whitney Houston o Crosby, Stills, Nash & Young.

También es sorprendente en la parte de exaltación que le toca al líder de The Pogues Lo es en su faceta de músico y también de poeta. Una presentación demoledora por parte de Temple, que ha sabido conjugar perfectamente los momentos más dolorosos con los optimistas. Muchas veces, sus versos son sentencias, como la parte del estribillo de Streams of whiskeycuando dice: Me voy, me voy, donde las corrientes del whiskey están fluyendo.